¿Qué significa tener éxito? Un amplio abanico de respuestas serían válidas para definir “tener éxito”. Por ejemplo, para mí sería un éxito poder celebrar con los 4 amigos de toda la vida, los de mi generación, los de verdad, no los que te dicen las redes sociales que tienes, nuestros 50 cumpleaños; la celebración que en 2020 no pudimos festejar, los 50 años que ya llevo a mis espaldas (y ellos en las suyas) .
Mencionada mi edad, si yo quisiera tener éxito en una carrera de 100 metros lisos contra el campeón olímpico, ¿creéis que podría conseguirlo? ¡¡¡Pues claro!!! Lo único que preciso es salir 1 minuto antes que él.
Si llevamos estos dos ejemplos mencionados al ámbito profesional lo podría traducir en:
Para tener éxito, lo primero que hay que tener muy claro es en qué queremos tenerlo y fijar un objetivo. Por ejemplo, si alguien me dijera que quiere tener éxito en aumentar sus ingresos, le diría que eso es un deseo y no un objetivo.
Si me hubiera dicho “quiero aumentar mis ingresos un 10%”, eso si sería un objetivo.
Los objetivos tienen que estar cuantificados, y deben ser medibles y accesibles.
Cuando visito talleres veo un problema, que se repite en muchos de los casos; no tiene punto de partida ni referencia a la hora de fijar un objetivo, salvo el dinero que entra en caja (creo que alguno ya me habrá leído o escuchado eso de “economía de cajón”).
¿Por qué ocurre? Porque, en general, el taller no suele medir. A muchos les “han colocado” un programa de gestión y no les han explicado ni el funcionamiento y ni las posibilidades que tiene. Por lo tanto, aunque tienen los medios no explotan sus posibilidades.
Ahora hablaré de la anticipación.
Hay un taller por cada 674 habitantes. ¿Os habéis parado a pensar por qué vuestros clientes os compran a vosotros y no a otros? Si tú eres igual de guapo que tu vecino…, me refiero con lo de “guapo” a que tanto tú como tu competencia tenéis un nivel técnico excelente, que tanto tú como tu competencia tenéis el mismo precio de mano de obra ….
Que error, eso de “pongo la mano de obra a 40€; mi vecino la tiene a 39 € y el otro a 41€, así que ni para ti ni para mí”. Sólo unas preguntas les hago los que me dan esta respuesta:
Lo siento, pero no puedo escribir un artículo sin hacer referencia a la importancia de la mano de obra. Punto y aparte; continuo con la anticipación.
Seguro que si piensas encontrarás el valor diferencial de tu taller con respecto a la competencia. Quizás será algo insignificante para ti , algo en lo que no hayas pensado y que nunca te has planteado que pueda resultar diferencial. Yo cuando entro en un taller y me pongo en modo cliente, debe ser que he pisado muchos, enseguida sé porqué cosas iría ese taller y por cuales no iría.
Cuando lo encuentres no te lo calles, comunícalo al mundo entero. ¡¡¡ Si, si; al mundo entero!!!.
Moraleja – No trabajes tanto y piensa más; busca un objetivo y lánzate a por él. Cuida la imagen de tu negocio (quizás ese sea un valor diferencial).
Piensa, observa y piensa, te lanzo una última pregunta ¿Cuántas zonas productivas y cuántas improductivas tiene tu taller? Piensa en ello y lo veremos en el siguiente artículo.
